Dos campeones del mundo, dos ex jugadores de la Juventus: Dybala y Paredes, la Roma confía en quienes conocen bien Turín para vencer al Toro. Paulino ya mostró el camino en la ultima visita a los dirigidos por Juric, lanzando con frialdad el penalti de la victoria a los pocos minutos de iniciado el juego. Ese fue el único disparo a puerta en un partido un tanto lento, con el equipo que estaba proyectado hacia la Europa League a pesar de tener todavía una posición interesante en el ranking.
Ahora, tras el doblete ante el Empoli y el acelerón ganador en Tiraspol, Dybala busca sobre todo continuidad. Desde el punto de vista físico se siente muy bien, desde el punto de vista deportivo un poco menos. Pero ya le ha dicho a Mourinho que está dispuesto a dar su aporte. No trivial. Nos las arreglaremos como siempre, evitando persecuciones innecesarias de los laterales, esperando la oportunidad adecuada para inventar.
La Roma espera que sus fuerzas aguanten el doble compromiso semanal: primero Turín, luego Génova. Pero es mejor pensar día a día, partido a partido. Hasta el momento Dybala, entre sanciones y dolores, ha estado disponible sólo 161 minutos de 450, prácticamente un tercio del tiempo, un total inferior a la media de años anteriores. Turín podría convertirse en una oportunidad para que Paredes confirme la senda de crecimiento lineal que le devolvió la sonrisa tras el descanso cuenta Roberto Maida en el Corriere dello Sport.
Más allá del gol en propia puerta provocado en Tiraspol, que dio a la Roma una ventaja inmerecida en la primera parte, Paredes está entrando en los mecanismos tácticos del equipo aumentando la calidad de su regate. En el nuevo plan orquestado por Mourinho desde el primer día de la concentración estival, que pasa por una mayor posesión del balón y una paciente construcción desde el fondo, se necesitaba un creador de juego puro para favorecer las llamadas «salidas» de la defensa. El riesgo es no tener suficiente cobertura, porque Paredes ciertamente no tiene las características físicas y temperamentales de Matic.