La Roma quiere hacerse con los servicios de Morata a toda costa, pero tiene que lidiar con la competencia. El delantero español es uno de los objetivos de los giallorossi para reforzar el departamento ofensivo, pero el club que dirige Mourinho no es el único al que le vendrían bien los goles del futbolista clase del 92. De hecho, además de la Roma, los intereses de otros equipos de la Serie A se han intensificado en los últimos días por el jugador del Atlético de Madrid.
Por ello la directiva y José Mourinho tienen prisa, quieren a Álvaro Morata en la Roma cuanto antes. Precisamente en Portugal, al comienzo de la preparación en suelo luso. Al atacante también le gustaría respetar cuanto antes la promesa que le hizo al entrenador y a su amigo Dybala. En las últimas horas, sin embargo, el español se ha convertido en uno de los más buscados del mercado, pues tras el Milan también el Inter y más recientemente la Juventus se han interesado por el jugador del Atlético de Madrid. Así que las próximas horas son decisivas.
Un primer paso se producirá hoy cuando Juanma López, agente de Morata, aterrice en la capital para arreglar los detalles con Tiago Pinto asegura Gianluca Di Marzio en su web. Sobre la mesa hay un contrato de cuatro años por valor de 4,5 millones de euros netos más quinientos mil en bonos por temporada, sin los beneficios del Decreto de Crecimiento. El verdadero obstáculo, sin embargo, sigue siendo llegar a un acuerdo con el Atlético de Madrid.
De hecho, el entorno de Álvaro insiste que la cifra de 10-12 millones como cláusula. El Atlético de Madrid, ahora tentado por una posible subasta, piensa diferente y pide al menos 20-21 millones. Este aspecto se aclarará hoy, porque por 20 millones la Roma no hará este tipo de operaciones. La hipótesis es trabajar a préstamo con obligación de compra. La cifra del próximo año la cubriría el dinero derivado de la venta de Frattesi al Inter. De esta forma, la Roma tendría entonces el presupuesto (quizás con la venta de Ibáñez) para completar el mercado de entrada.
Morata solo desearía ir a la Roma
Por otra parte el Corriere dello Sport en su portada de este lunes asegura que Morata habló claro a todos los que se pusieron en contacto con él para pedirle información sobre el futuro: «Quiero ir a Roma«. La Juventus, que ya lo acogió durante cuatro temporadas en dos períodos diferentes de su carrera, tomó nota de ello en el momento más candente del asunto Lukaku, el Milan observa con las luces apagadas, el Inter aún no ha entrado realmente en el campo.
En definitiva: al menos durante unos días, Roma será el único destino posible para Morata. No es casualidad que el agente Juanma López aterrice en la ciudad para ultimar los detalles del acuerdo con Tiago Pinto: está listo un contrato. Si el agente se mueve, no es para escuchar. Juanma López ya lo sabe. En todo caso, debe definir.
Los Friedkins aún no han dado luz verde a una inversión que podría llegar a los 40 millones brutos en cuatro años, excluyendo el precio del traspaso, pero lo harán pronto. Es hora de entender que tal fichaje hará más plausible un regreso a la Champions League, donde la Roma no ha entrado en las últimas cinco temporadas. A esta propiedad no le gusta gastar en más de 30 futbolistas, especialmente cuando se establece un plan a largo plazo. Pero para Morata se están planteando una excepción.
Mourinho, que aprovechó ayer la jornada de descanso para acudir al Foro Itálico a ver las finales de pádel, espera confiado y en silencio en el horno Trigoria, mientras Dybala sigue informándose. Pero es demasiado pronto para decir con certeza que Morata se convertirá en el próximo delantero centro de la Roma.
En la última conversación entre directivos deportivos, Pinto le hizo saber a Andrea Berta que no tiene la liquidez necesaria para pagar los 12 millones previstos como finiquito del nuevo contrato que ha firmado Morata con el Atlético (hasta 2026, un año menos que para propuesta de Roma). Sin dinero, la operación podría encallar incluso si los clubes, para facilitar la negociación, pudieran decidir pactar un traspaso cedido con obligación de rescate fijada para el próximo año. Es la cifra que, curiosamente, cobrará la Roma el 1 de julio de 2024 como porcentaje de la reventa de Frattesi, que pasó del Sassuolo al Inter con la misma fórmula. Es y seguirá siendo negociado durante toda la semana. Si no más allá.
