La gran noticia de estos dos últimos entrenamientos es que Stephan El Shaarawy está bien. El pequeño dolor que lo llevó a pedir el cambio en Florencia durante el intervalo ya se ha superado por completo cuenta este lunes Corriere dello Sport. Puede jugar la final el miércoles. Y es posible que Mourinho lo elija en el once inicial encomendándole el ambicioso rol que normalmente ocupa Paulo Dybala (quien apunta arrancar desde el banquillo), junto a Pellegrini y detrás de Abraham.
Se llama meritocracia, se llama lucidez. Pese a la lesión en Monza, que dejó fuera durante unos 20 días, El Shaarawy es quizás el mejor jugador de la Roma en 2023, al menos en la ratio entre rendimiento y minutos jugados: con 8 goles entre el campeonato y la Europa League, incluido uno decisivo en la prórroga contra el Feyenoord, igualó los números goleadores de Paulo Dybala, sin embargo sin patear un solo penalti.
No es fácil renunciar a un arma tan punzante, al menos por una parte del juego. Y Mourinho, que el año pasado le citó como ejemplo de profesional ejemplar, no es de los que dejan escapar las buenas oportunidades.
Tres goles en los últimos tres partidos. Y con Salernitana, en su regreso tras la lesión muscular, jugó de carrilero izquierdo y no de atacante. El Shaarawy parece haber renacido en el nuevo año, en el que ha sabido convivir con la precaria situación del equipo en el costado izquierdo sacándole el máximo partido, ganando poco a poco protagonismo dentro del grupo.
No alcanzaba unas cifras tan determinantes desde 2019, el año anterior al Covid, cuando la Roma le vendió entonces a China por 18 millones de euros. En ese campeonato gris fue el máximo goleador del equipo con 11 goles. Incluso en ese caso vivía en la incertidumbre sobre su futuro, pues esperaba obtener la renovación del contrato. La Roma, sin embargo, prefirió cobrar una plusvalía y él, convencido por el sueldo de locura que le ofrecía Shenhua, accedió a regañadientes a dejar Trigoria.
Esta vez El Shaarawy espera que la historia termine de otra manera. A través de su hermano-agente Manuel se encontró en varias ocasiones a Tiago Pinto, quien lo devolvió gratis a Roma en enero de 2021 tras una larga negociación. La intención común es llegar a un acuerdo para continuar juntos.
