Nadie puede ignorar las incógnitas, ni pretender que no hay elecciones impensadas, ni que sea posible perder a Kim o que llegue alguien con una oferta lista de 120 millones para Osimhen cuenta Corriere dello Sport.
Pero antes de quedarse varado en el factor sorpresa, el Napoli mira a su alrededor, observó, estudió, memorizó, comparó: no se encuentran jugadores top de bajo costo (18 por Kim, por ejemplo) que puedan cumplir ciertos requisitos y tampoco se encuentra a un atacante desde la tarde noche a la mañana siguiente. Por ahora, hay una lista de gustos.
Entre los delanteros centro, Tammy Abraham (25) tiene un lugar privilegiado, porque el inglés de la Roma siempre ha estado ahí en los cuadernos de Giuntoli; pero Rasmus Hojlund (apenas 20) seguro que no podrá desaparecer del radar nada más llegar a Italia demostró que tiene calidad; y ahora también ha acabado bajo los reflectores Boniface (23) del Union Saint-Gilloise, una avalancha de goles (20) con el club belga y un nombre evocador, Víctor.
Hay diferentes naturalezas de delantero centro, tendencias que no se parecen en nada al ataque de área y espacio, incluso los físicos caen en (claramente) naturalezas diferentes e inmediatamente después de Abraham, Boniface y Hojlund, incluso, esta Beto (25) del Udinese, un hombre que ve el gol, que lo siente, que ya ha conocido el campeonato italiano, que por lo tanto no tiene que adaptarse y que estaría inmediatamente listo.
