Lo que más me gusta de los equipos de José Mourinho es la semejanza con su personalidad.
Todos los equipos del portugués reflejan perfectamente su personalidad. La Roma es una buena muestra de ello; se ha convertido en un equipo luchador, con ganas de mejorar y trabajar todo juntos. Al mismo tiempo los giallorossi son un equipo humilde y consciente de sus propios limites.
En sus clubes Mourinho necesita un grupo que trabaja por el mismo objetivo: el bien del equipo. Puede parecer duro, pero quien sea que no trabaje a favor del equipo es alejado. Muchas veces nos preguntamos sobre cuestiones a las cuales no tenemos respuestas. Y nos preguntamos porque tal jugador no juega, porque no se intenta mas cual alineación etc…
Hay veces que nos olvidamos que los jugadores son seres humanos y como tales pueden tener momentos de debilidad, molestias con la familia o por cualquier factor que nosotros no podemos saber. El primer ejemplo que me viene a la cabeza es el de Tammy Abraham. El inglés tuvo un momento malo. Algunos rumores sugieren que tuvo problemas con su pareja, el problema con Southgate que no quiso llamarlo para ir en Qatar y quien sabe que más. En este momento la cuestión era «porque no juega Tammy, que le pasa a Tammy»…
El 9 se recuperó y ahora está bien y se hace notar. Contra la Fiorentina hubiera podido intentar el disparo al arco, pero eligió dar este pase a Paulo. ¿Por que? Por el bien del equipo. Es evidente que hace mucho hay un jugador que juega para sus cuestiones personales. Hay un jugador que piensa tener el mundo en contra cuando la realidad es que lo único que están contra suyo (quizás) son aquellos que están a su alrededor (que supuestamente parece que quieren su bien) y su misma cabeza (y los árbitros pero esto es otro tema).
Todo el mundo sabe que las referencia son para Zaniolo. A todos nos duele hacer reflexiones similares pero es la verdad. El Shaarawy ha tenido que soportar mucho banquillo. Cuando ha jugado tuvo que jugar de lateral/carrilero y jamás se quejó. ¿Por qué? Por el bien del equipo.
El Faraone siempre tuvo un actitud positiva y consciente de sus limites los cuales supo esperar y aprovechar las (pocas) ocasiones concedidas. La Roma ha cuidado y querido a Zaniolo como si fuera un hijo. Eligió creer en el cuando probablemente ni él creía en si mismo. La Roma esperó a Nicolo dos veces. Lo ofreció la renovación cuando no se sabía cuando y como iba a volver. La Roma celebro junto con él cuando volvió y estuvo a su lado a pesar de los pésimos números.
Ahora él quiere una cifra entorno a los 5 millones por temporada cuando Dybala cobra 4,5. Entiendo que el fútbol romántico ya no existe pero hay veces que hay que hablar menos y jugar más. Ante de pedir un contrato con estas condiciones hay que mirarse al espejo y hacer un examen de consciencia.
La situación le duele mucho a todos. El propio jugador esta dando una imagen pésima. A ningún entrenado, a ningún vestuario y a ningún club le gusta tener a un jugador así. La Roma no puede venderlo por 15 millones y la situación corre el riesgo de convertirse en una pesadillas por ambas las partes.
¿Qué pudiera Pasar?
Pudieran ser tres los posibles escenarios;
- Llega un club con una oferta decente y se va. La más improbable si se quiere.
- Se queda en el banquillo hasta junio. Ahora mismo la que más posibilidad tiene de convertirse en realidad.
- Se queda, baja la cabeza y vuelve a jugar con y para el equipo. Ojalá pase, pero depende todo de Zaniolo.
Lo cierto es que el talento sin cabeza y trabajo vale muy poco. Esto vale para todos. Zaniolo es la confirmación, no la excepción. El 22 debería reflexionar sobre una frase de Tihenry Henry que dice; «Juega para el escudo que llevas delante y todos se acordarán del nombre atrás». Cuidate Nicoló nosotros te perdonaremos esta también si quieres.
¿Por qué?
Por el bien del equipo. Por el bien de la Roma.