Solo vale ganar. No hay manera más clara de afrontar un partido, que con la victoria como único resultado posible para los intereses del equipo capitalino.
Y es que la clasificación de la Roma a la siguiente ronda de la Europa League, pasa por una victoria el próximo jueves, 3 de noviembre, en un Estadio Olímpico de nuevo a rebosar. Con la derrota del Ludogorets frente a un Betis con el liderato ya certificado, el plan de la Roma no cambia.
Una victoria, independientemente de si es por 1 o más goles, daría la segunda plaza al conjunto italiano. Con el 2-1 de la ida, la Roma igualaría el gol-average en cualquier situación de victoria, y sería en +- global lo que acabaría decantando la clasificación final del lado del cuadro romano.