Marco Conidi habló sobre su amor por los colores amarillo y rojo en una entrevista con el diario Il Messaggero. El actor y cantante, autor de «Mai solo mai«, canción dedicada a la Roma y presente esta temporada en la previa del Olímpico, explicó qué significa ser romanista. Conidi habló entonces de José Mourinho y los Friedkins. Estas son sus palabras.
¿Ser hincha de la Roma significa estar satisfecho?
No. Ser hincha de la Roma significa amar a tu equipo. Tener un sentimiento que está más allá de cualquier cosa.
¿Entonces Lotito está equivocado?
Prefiero no hablar de directivos o presidentes de otros equipos. Solo comento lo que dice el presidente y los líderes de Roma.
Los romanistas no discuten, aman. ¿Qué significa esta frase para ti?
Te enamoras sin saber el precio que pagarás. Sin mesura y de forma total y sin escrúpulos. Cuando te enamoras es como cuando te enamoras de una mujer, no tomas en cuenta cuantos sufrimientos y alegrías vas a tener, y esto es hermoso”
Entonces, ¿el hincha de la Roma es diferente a los demás?
Cualquiera que esté enamorado y sea hincha de la Roma nunca lo ha hecho porque tiene un palmares lleno trofeos o porque gana algo cada año. Hay otros equipos que pueden presumir de esto. Estamos enamorados porque ese sentido de pertenencia nos hace mirar a los ojos a millones de personas y sentirnos hermanos, amigos y parientes. Nuestra familia. Esto vale mucho más.
¿Has escrito Mai solo mai, un himno al amor?
También recibo halagos de hinchas de otros equipos porque habla de ese sentimiento que es tan claro para quien lo siente, pero que es difícil de explicar. Busqué imágenes de cuando era niño, de Agostino Di Bartolomei, viajes para ir al estadio. El estadio es la única ocasión en la que hay una empatía muy fuerte con un extraño. Da igual la clase social o la ideología política: eso es una cita con el amor.
¿Cómo sucedió en el Olimpico durante la final en Tirana?
Sí, había 50.000 personas en un estadio donde no se jugaba ningún partido. ¿No te parece un gesto de amor? Estuve allí, canté antes del partido y me emocioné. Encontrarme con tantos en el estadio, vernos y abrazarnos es un sentimiento que también deseo para otros equipos»
¿Los Friedkin devolvieron la empatía entre clubes y aficionados?
Es un liderazgo ilustrado y preparado. A quién le importa la hinchada después de años en los que la gestión anterior casi condenaba el romanismo, el romanismo y el sentido de pertenencia. Lo hicieron una prioridad y los números dicen que tenían razón. Además hay un líder maravilloso: sencillo y directo, en un mundo donde todo el mundo tiene diez caras él tiene una.
¿Ayudó Mourinho a marcar la diferencia?
Es una seguridad que debe existir entre el equipo y la ciudad, mientras él esté en el banquillo me siento seguro.
¿Qué esperas del próximo año?
Después de esta temporada sellada con una victoria, todos tenemos la aspiración de hacer algo más. Aunque mi trabajo sea ser hincha porque es un papel muy importante. El equipo consiguió algunos puntos más gracias a nosotros, al empuje y al cariño de la gente..
