Tras la resaca que dejó la alegría por la victoria de la Conference League, los jugadores de la Roma –los no convocados por sus respectivas selecciones– partieron de vacaciones para disfrutar de unas semanas de relax. Y como siempre, uno de los destinos más demandados desde los primeros días es Ibiza. Una escala casi fija para Stephan El Shaarawy, que también voló a ese destino turístico el año pasado en junio.
Un paraíso que atrae a muchos jugadores, agentes y directivos. Según la redacción de Forzaroma.info, el jugador de la Roma cenó anoche en el ‘Piccola Cucina’ de Ibiza, junto a dos personajes bien conocidos: Adriano Galliani y Paolo Maldini. Un encuentro de matices rossoneri, los colores que los unen entre pasado y presente. El restaurante es propiedad de Gabriele Giuffrida, un conocido representante de futbolistas muy cercano al entorno milanés (es el agente de Pioli, Messias y Mirante) y en el pasado también a la Roma.
Una oportunidad, probablemente, para intercambiar elogios mutuos ya que los tres vienen de una temporada triunfal entre el Scudetto, el ascenso a la Serie A y la Conference League. Y precisamente Galliani en los últimos días ha saltado a la palestra debido a los rumores del mercado que ven nombres importantes como Candreva, Messias, Sensi y hasta Belotti relacionados con el club de Lombardía.
El objetivo del Monza es hacer un campeonato importante y apuntar a la salvación, incluso con jugadores de nivel y experiencia, como podría ser el propio El Shaarawy. El perfil sería ideal para Galliani, el faraón ha disputado esta temporada 37 partidos con la Roma, pocos como titular en Liga. Para Mourinho es un jugador de cambio, también el año que viene entre Spinazzola y Zalewski, tanto con la defensa de tres como de cuatro, corre el riesgo de contar con poco espacio.
En el Monza sería un ‘faraón’ de nombre y, de hecho, no sería de extrañar que Galliani le hubiera hablado de algo al oido. El Shaarawy en Roma está más que bien, se siente como en casa, pero solo tiene un año de contrato con los giallorossi y de momento una renovación parece un escenario bastante lejano. Para Galliani, neto del salario decididamente alto del atacante nacido en 1992 (3,5 millones), puede ser una opción interesante.