A la espera de la emoción de Tirana, y a la espera de la decisión de Dybala, la Roma se mueve en el mercado. Y apunta con determinación hacia su primer objetivo, naturalmente por indicación de Mourinho: Tiago Pinto, como comentamos ayer, se adelantó en la carrera por Maxime López, el mediocampista francés del Sassuolo. El técnico le ha seguido durante todo el campeonato, e incluso habló con entusiasmo en rueda de prensa y le considera el refuerzo adecuado para la medular de la próxima temporada por sus características técnicas y tácticas.
La negociación aún no ha entrado en pleno apogeo, en el sentido de que hay que profundizarla, pero los sondeos romanistas han sido frecuentes: llevan al menos un par de meses, cuando se hablaba de un hipotético interés por Raspadori.
Máxime está valorado en 15 millones y gusta a muchos equipos, incluido el Inter. Pero la Roma tiene una carta decisiva sobre la mesa de negociación según Corriere dello Sport: Davide Frattesi, otro de los jugadores que podría salir del Sassuolo, sobre el italiano por contrato aún los capitalinos tiene el 30 por ciento de la posible reventa, que se puede estimar en 6-7 millones y podría servir para bajar el precio por el ex del Marsella.