Mourinho fue claro: «no esperamos grandes inversiones para enero, pero llegarán un par de refuerzos«. Aunque no haya grandes inversiones, deberían llegar dos jugadores, un mediocampista de calidad y un lateral derecho. La prioridad de Mourinho es siempre el centrocampista, objetivo buscando el pasado verano.
En Alemania desde hace unos días se rumorea un interés por Tolisso del Bayern Múnich, que tiene su contrato a punto de terminar en junio, así como por Florian Grillitsch, austriaco del Hoffenheim. El tema del primero, parece más difícil, dado el altísimo salario y la competencia del Atlético de Madrid. Ambos han sido propuestos a Pinto, quien solo puede realizar operaciones a préstamo con derecho u obligación de compra.
La opción Zakaria se ha vuelto complicada, quien tras cambiar de agente tiene muy altas expectativas económicas. Para el papel de lateral derecho, en cambio, crecen el interés por Max Aarons, de 21 años, inglés de Norwich, que puede venir cedido con opción a compra. Y para ocupar el rol de alternativa a Karsdorp, Henrichs del Leipzig permanece en la carrera, mientras que Pedersen de Feyenoord parece ser una alternativa que está menguando según cuenta hoy Corriere dello Sport.
También fue ofrecido Stryger Larsen, que por motivos contractuales está contando poco para el Udinese. Para contar con el extremo danés de 30 años en enero bastan dos millones de euros, pero no parece ser un perfil que pueda interesar a la Roma. Lo seguro es que Reynolds saldrá cedido, y se espera que Spinazzola regrese por la izquierda y estará listo en enero.