Fonseca tiene pocas dudas de cara al partido de La Spezia, donde la Roma cerrará su turbulenta temporada antes de ponerse en manos por completo en José Mourinho. Las pocas dudas que tiene el míster están así hasta la víspera del encuentro, por lo demás las elecciones del técnico están fuertemente condicionadas por problemas físicos y boletines médicos. De hecho, los Giallorossi tendrán 10 jugadores no disponibles. La defensa será una mezcla de aquella que inició el derby y la que lo terminó: Karsdorp, Mancini, Kumbulla y Bruno Peres, con Fuzato muy confirmado en la portería.
Fonseca en el centro del campo no renuncia ni siquiera esta vez a Ebrima Darboe, que nunca se ha quedado fuera de un once tras la semifinal ante el Manchester. Cristante debería estar compartiendo la mediana con el gambiano, y ante la ausencia de Pellegrini, Villar también intentará encajar en este idilio de final de campeonta. Detrás del delantero centro -con Mayoral favorecido sobre Dzeko- calienta el trío formado por Pedro, Mkhitaryan y El Shaarawy. Pero según Corriere dello Sport, crecen las oportunidades para el joven Nicola Zalewski: Fonseca le tienta la idea de lanzar al atacante clase 2002 por primera vez como titular esta temporada, después de haberle hecho saltar al terreno de juego en la Europa League y en los últimos diez minutos ante el Crotone.