Pese a que es casi imposible llegar al cuarto puesto, el partido de esta noche ante el Atalanta -Gasperini saca 3 de 3 ante Fonseca en estas dos temporadas- sigue siendo muy importante para el momento «histórico», según informa Corriere della Sera.
El rotundo fracaso de la Superliga consiguió un resultado: acercó a la afición Giallorossi a la presidencia de Friedkin como nunca antes. Los norteamericanos habían sido criticados a menudo por no haber tomado posiciones fuertes – o por haberlas cambiado a la carrera como por ejemplo en el caso de los derechos televisivos, en este caso demostraron una sincronización perfecta, hablando antes del colapso del plan de Agnelli y Florentino Pérez, y no después.
La diferencia entre valentía y oportunismo. Los cumplidos del Bayern llegaron desde Múnich, entregados por Rummenigge, director general de los bávaros. Con Juve, Milan e Inter fundando la Superlega era importante que un equipo italiano como la Roma se opusiera al «fútbol de los ricos».
Paulo Fonseca también está orgulloso de su equipo, pero la Roma tiene que dar una respuesta esta noche. No se puede pasar esperando al Manchester: «El campeonato no ha terminado para nosotros, tenemos que jugar para ganar».